Las bandas Vetusta Morla, Amaral y Samba Da Rua han querido solidarizarse con la familia del cámara de Telecinco José Couso fallecido durante la guerra de Irak hace once años. Los grupos actuarán este domingo 6 de abril a las 12:30 horas frente a la embajada de Estados Unidos en Madrid y pedirán justicia como mejor saben: con su música.

 

Este acto, que se celebra desde el fallecimiento de Couso y es organizada por La asociación de Hermanos, Amigos y Compañeros (HAC) de José Couso, contará además con las intervenciones de David Couso, hermano de la víctima, Maribel y Rafael Permuy, madre y tío del mismo y Enrique Santiago, abogado del caso.

 

Este hecho se celebra ante la necesidad de hacer justicia por la muerte de José Couso, un procedimiento que aún sigue abierto gracias al juez Santiago Pedraz que se ha negado a archivarlo, en especial, ante las “evidentes lagunas” que tiene la reforma que limita la jurisdicción universal y que no se puede aplicar al caso. Este hacía pública su decisión en un auto que se puede consultar en el siguiente enlace.

 

La resolución fue necesaria ante los continuos intentos de cerrar la investigación por parte de fiscalía y gobernantes, sobre todo del Partido Popular que, con la puesta en vigor de la reforma, pretende cerrar alrededor de doce casos amparados por la Justicia Universal, entre los que se encuentra el de Couso.

 

La familia tampoco está de acuerdo con este cambio legal y se refería a ello de la siguiente forma en un comunicado: "Es fundamental reparar el dolor de una familia que pide justicia, pero aún más importante es defender la libertad de información y de prensa. Con esta nueva reforma, el Gobierno, obedeciendo a los dictados de las grandes potencias, deja sin tutela judicial a los ciudadanos españoles que viajen al extranjero y sean víctimas de crímenes de lesa humanidad".

 

XI aniversario de la muerte de José Couso

 

El cámara de Telecinco murió el 8 de abril de 2003 en Bagdad cuando se encontraba en el Hotel Palestine, sede de la prensa independiente, a causa del ataque de tropas de Estados Unidos. En tres horas, este y otros dos centros donde trabajaban los periodistas fueron abordados. Esto dio como resultado tres corresponsales muertos y varios heridos, sin embargo, el de Couso es el único caso abierto en todo el mundo contra soldados estadounidenses. Y, aunque cinco de ellos están imputados, ninguno ha sido juzgado.

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